martes, 7 de octubre de 2008

Crear dos, tres... muchos Napias, es la consigna


"No hay que buscar responsables de la grave situación entre los productores rurales, sino más bien entre Moreno y sus amigos, los verdaderos artífices de la inflación"



Parece que los cortes no son lo que eran. Para colmo aún restan varios días de look-'out'. Por esta razón, el Civil Buzzi recurre al manotazo desesperado, al viejo truco de desacreditar la solemne estirpe del Napia.

Para el Lacanocookismo esto denota una melancolización de lo ‘perdido’, junto a los Ideales Patrios que retornan de aquellas maravillosas jornadas palermohollywoodenses; evento en el que, como diría Micky 'Vainilla' Heidi-gger, pudo esenciarse la Verdad del Ser-Argento.

Sólo que esta vez el Napia está fuerte. Parado. Como muestra de aquello, el nuevo intelectual K (¿?), Tomás Abraham, acaba de reconocerle su acalorada y patriótica labor.


"Como la teoría económica ha señalado hace tiempo que la racionalidad aplicada al cálculo utilitario no es la única variable a tomar en cuenta, y que las expectativas de los agentes económicos inciden en la economía real, se sabe entonces que los comportamientos autoinducidos producen un efecto de cascada y orientan el comportamiento del mercado. La subjetividad es un dato insoslayable a tener en cuenta, y el modo en que opera el sistema de miedos y alivios permite que una vez que se habla de baja de la inflación, ésta baje aún más, del mismo modo en que estos meses al decir que los precios aumentaban cada día, éstos crecían más aún. Por eso mentir respecto del INDEC era parte de la lucha contra la inflación."


Claro que ser irónico y copado como Abraham no es tarea sencilla. Sobre todo desde ese Perfil de pureza.

Sin embargo, ya desde el 25 de Febrero (!), el cumpa Aliverti nos obsequiaba una excelente columna (en contenido casi idéntico): Pegame y llamame Marta. (No se la pierdan)


PD: A esta altura del partido nadie duda de la decisiva intervención de los chaquers en la elevación de la expectativa inflacionaria (decían no desabastecer, hoy aseguran no volver a hacerlo). Qué va... El Lacanocookismo lo vivió en carne propia cuando en sus análisis les remarcaban impunemente el precio de la sesión. Ahijuna canejo !

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